El insomnio no vendrá a visitarte cuando tú quieras.
Él vendrá cuando le plazca,
cuando los nuevos proyectos estén revoloteando en tu cabeza,
cuando las mariposas estén nadando en tu estómago
y no tengas otra cosa más que hacer,
sino pensar en él o en ella.
Vendrá cuando más necesites dormir
y te hará encender la lamparita al lado de tu mesa de noche,
para lograr así,
espantar a los fantasmas que te atormentan.
Él vendrá y te pondrá a leer Benedetti.
Él vendrá y te dejará desvelado por 500 noches.
Él vendrá y te hará llorar con Casablanca.
Te dejará dormido con lágrimas en la almohada.
Te dejará con un agotamiento mental,
que te hará despertar a la mañana siguiente
con resaca espiritual.
con resaca espiritual.
Pero él quedará intacto,
feliz gracias a tus miedos,
gracias a las fobias
que guardas en el ático de tu mente.
que guardas en el ático de tu mente.
El insomnio vendrá
justo cuando menos lo esperes
y se marchará
cuando más lo necesites.
En fin,
estamos adictos
a esa clase de miseria.
Atte. Ostwald Guillén
(AKA El Bastardo)
Atte. Ostwald Guillén
(AKA El Bastardo)
0 Comments